Con música y personajes que transmitieron una profunda carga emocional de melancolía, alegría, tristeza, esperanza y triunfo ante el amor, se presentó en Mazatlán “Elixir de amor”, la ópera compuesta por Gaetano Donizetti, una de las obras más representativas del bel canto italiano
Mazatlán, Sinaloa.- Talentosos intérpretes internacionales: el Tenor Carlos Alberto Velázquez en el papel de “Nemorino”, Mariana Ruvalcaba que interpretó a “Adina”, Daniel Gallegos como “Belcore”, Rodrigo Urrutia quien encarnó al merolico “ Dr. Dulcamara” y la Soprano panameña Susan Samudio en el rol de “Gianetta”, dieron vida a los personajes principales de una de las óperas cómicas más encantadoras del repertorio mundial.
En un universo único (hospital siquiátrico) creado por Escena 77 en co producción con el Instituto de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán y la empresa TG Soluciones, “Elixir de amor” conjuntó la participación de la Camerata Mazatlán dirigida por el maestro Sergio Freeman y el Coro Ángela Peralta dirigido por la maestra María Murillo y Sergio Castellanos, agrupaciones que a través de los instrumentos y la voz humana ofrecieron melodías melancólicas y armonías conmovedoras logrando mantener embelesado al público de principio a fin.
La propuesta artística tomó como eje central el amor y la libertad, expuso temas como la desigualdad social y la discriminación, y aplicó la inclusión de personas con diversas discapacidades, por ello además del solista principal, Carlos Alberto, que es ciego, en el Coro participaron Isaac González que es autista y Lupita Orduño que tiene debilidad visual.
La espléndida música fue enmarcada por un ambiente rudo e ingenuo, el Director de Escena, Rodrigo Caravantes, decidió agregarle un “twist” a la ópera situándola en un hospital psiquiátrico, el diseño de la escenografía fue de Robertha Coronado que ha trabajado en montajes de danza, teatro y ópera en los recintos más importantes del país como el Palacio de Bellas Artes, Auditorio Nacional, Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC) e instituciones como la Compañía Nacional de Ópera.
Alberto Velázquez con un maquillaje depresivo en el rostro interpretó “Quanto é bella, quanto é cara” dejando al público enternecido con su voz, y “Adina” Mariana Ruvalcaba cambia su actitud al notar que “Nemorino” le ofreció amor verdadero, así como en su cuento favorito “Tristán e Isolda”.
Con diseño de iluminación de Agustín Martínez; maquillaje de Axiel Díaz, coreografía de Mónica Armas y producción ejecutiva de Patricia Pérez, “Elixir de Amor” muestra a un ingenuo y depresivo Nemorino enamorado de una hermosa Adina que lo trata con indiferencia, desesperado el joven se acerca al Dr. Dulcamara, un charlatán, vendedor de milagros quien le ofrece un “elixir” –en realidad cerveza, envasada como las llamadas “Ballenas” en Sinaloa- con la promesa de que le asegurará el amor de Adina y de todas las mujeres.
Para dar celos a Nemorino, Adina anunció su matrimonio con el jefe de camilleros del hospital, el arrogante y vanidoso, Belcore. Nemorino pretende acelerar los efectos del brebaje mágico bebiéndolo todo sin remordimientos. Repentinamente, se ve rodeado de todas las jóvenes, incluidas Gianetta y Adina.
Nemorino aparece solo, triste y pensando en una lágrima que él vio en los ojos de Adina cuando él la ignoró antes debido al efecto del elixir, canta la hermosa romanza para tenor “Una Furtiva lágrima”, una de las cinco arias más célebres de la ópera mundial, misma que selló el talento interpretativo del Tenor Carlos Alberto Velázquez.
La ambientación para presentar el “Elixir de Amor” en un hospital psiquiátrico abrió oportunidad al diseño de vestuario de Laura Arriaga que comprendió la idea creativa de Rodrigo Caravantes que lanza propuestas artísticas novedosas.
El Coro Ángela Peralta tuvo una presentación relevante, ya que esta ocasión trabajó al lado del Tenor Alberto Velázquez, persona con discapacidad visual que ha ocupado lugares importantes en la competencia operística Carlo Morelli y en el Concurso Alfredo Kraus en la ciudad Las Palmas de Gran Canaria, España y con la ganadora del premio Gilda Morelli a la Mejor Interpretación en el XXXIX Concurso de Canto Carlo Morelli, Mariana Ruvalcaba.